Nuestra Señora de París, sublime y majestuosa

París, siglo XV y, más concretamente, 1482. La ciudad se sacude los estertores de la Edad Media. En lo alto de Notre Dame, Quasimodo, custodia el alma de la catedral proyectando su grandeza a través del repicar de las campanas. Aquejado de sordera y una severa malformación, es un hombre que no se deja ver. […]

Más